¿CUANDO DEBO REMOLCAR MI CARRO?

Según nuestras investigaciones y experiencias, a continuación analizamos las causas por las cuales debes o no remolcar tu carro con una grúa

Cauchos pinchados:
Un caucho pinchado es extremadamente común, pero no todos están equipados, o listos, para lidiar con este problema. Si no puede cambiarlo al costado de la carretera, debe remolcarlo a un taller o reparacion de cauchos mas cercano. Incluso si puede poner un repuesto, la mayoría no son completamente funcionales a altas velocidades, por lo que probablemente sea la opción más segura conseguir una grua. 

Una cosa es segura: nunca debe conducir su carro con una rueda pinchada. Si elige hacerlo, podría resultar rines doblados y problemas mayores

Luces de advertencia:
Si la luz de verificación del motor se enciende y permanece encendida (en lugar de parpadear), generalmente puede conducir el automóvil hasta llegar a un taller de servicio. Sin embargo, si la luz de verificación del motor parpadea, debe remolcar su automóvil y observarlo de inmediato. Si su luz de aceite está encendida, no requiere remolque, pero tampoco le recomendamos que conduzca mucho hasta que la cambie. Podría causar daños que requieren reparaciones extensas. Finalmente, si ve que su luz de alta temperatura está encendida, le recomendamos remolcar y, al menos, detenerse.  

Humo saliendo de su motor 
Probablemente no sea necesario decirlo, pero si ve humo saliendo del capó de su automóvil, no le recomendamos conducir. Si ve humo o vapor blanco, o huele a gasolina, puede ser una situación especialmente peligrosa. No solo debe remolcar su automóvil, sino que debe alejarse lo más posible de él. Tampoco abra el capó.  Si el humo es azulado y huele a aceite de cocina quemado, es probable que haya una fuga de aceite que gotea en el motor. 

Como dijimos anteriormente, la falta de aceite puede dañar su motor, por lo que debe remolcar y reparar el automóvil de inmediato.  

Ruidos o comportamientos extraños 
Usted sabe mejor que nadie cómo debería sonar normalmente su automóvil. Si escuchas un ruido fuerte o uno extraño y repentino, es mejor detenerte, especialmente si es persistente. Podría ser algo atascado en su rueda o un problema mecánico que necesita una reparación más seria. Si no puede resolver cuál es el problema después de detenerse, lo mejor es remolcar el automóvil.  

Finalmente, si su automóvil se vuelve repentinamente difícil de conducir, siempre debe dejar de conducir. Podría ser causado por un pinchazo, una rueda floja, una dirección asistida fallida o una serie de otras cosas. Si no puede averiguar qué está causando el problema, no debe conducir el automóvil hasta que se haya solucionado.